La tecnología al servicio de la salud: Mira la tecnología usada por China y otros paises, para combatir el covid-19 en el mundo.

IA y supercomputación contra el coronavirus

Saber su estructura para así poder conocer cómo se comporta y, tras ello, saber cómo atacarlo. Esa es la misión a la que se ha encomendado el equipo de DeepMind, la Inteligencia Artificial propiedad de Google.

Mediante una técnica de aprendizaje llamada «free modelling» (modelado libre), DeepMind ha conseguido lanzar una predicción sobre la estructura de proteínas que forma el virus causante del COVID-19 que podría ser la base para futuros estudios y contribuir a que la comunidad científica descubra cómo funciona el virus.

Descubrir también el comportamiento del virus es el reto al que se ha sumado Summit, el superordenador más potente del mundo, desarrollado por IBM.

El equipo de investigadores del Laboratorio Nacional de Oak Ridge, en Estados Unidos, está utilizando esta máquina para identificar y estudiar compuestos de medicamentos que puedan servir para encontrar una cura contra el coronavirus.

Como explican desde la propia IBM, para comprender el funcionamiento de los virus, los investigadores tienen que hacer crecer el microorganismo y estudiar cómo reacciona cuando se les aplican diferentes compuestos de medicamentos. Un proceso muy lento en el que, gracias al uso de ordenadores, se pueden realizar simulaciones digitales que reduzcan el rango de variables potenciales.

Con ordenadores normales existe la dificultad de que cada una de estas variables individuales puede estar compuesta por millones o incluso miles de millones de datos únicos, así que su análisis es muy difícil utilizando hardware básico. Algo que el Summit facilita: gracias a él, los investigadores del Laboratorio Nacional de Oak Ridge, han podido simular 8.000 compuestos en cuestión de días.

También IBM ha querido aportar a la lucha contra el COVID-19 su tecnología IBM Clinical Development (ICD). Con la Inteligencia Artificial como base, este sistema puede ayudar a realizar de forma acelerada los ensayos clínicos necesarios para el desarrollo de los medicamentos que combatan el virus.

Las tecnologías que ha usado China para detener al coronavirus

China es el ejemplo perfecto de cómo utilizar la tecnología para derrotar brotes como el del coronavirus. Inteligencia Artificial, drones, apps, robots y mucho más.

A finales de 2019, la ciudad china de Wuhan se convertía en el foco de origen del coronavirus, conocido científicamente como COVID-19. El resto del mundo era espectador de cómo China obligaba a sus ciudadanos a permanecer encerrados en sus casas para evitar que el virus se expandiese aún más.

Tras 50 días de cuarentena, la vida en China parece estar volviendo poco a poco a la normalidad. Pero, ¿cómo lo han hecho? ¿Qué ejemplos podríamos tomar de China para aplicarlos en un territorio europeo con cada vez más infectados?

Como es lógico, el personal sanitario ha tenido que librar una batalla titánica, sin embargo, no hemos de olvidar la relevancia que ha tenido la tecnología para superar la crisis en China. Analizamos las tecnologías que ha usado el gigante asiático para lograr detener el coronavirus.

Una app imprescindible
No teníamos duda alguna de que China es uno de los países más avanzados tecnológicamente, incluso podríamos aventurarnos a decir que posiblemente sea el líder mundial en dicho campo. No obstante, durante los últimos meses acaban de demostrar lo útiles que pueden llegar a ser dichas tecnologías en casos de extrema necesidad.

Empecemos por lo más «básico»: los smartphones. Teniendo en cuenta que prácticamente cualquier persona dispone de un móvil, lo ideal para frenar una epidemia es comenzar por dichos dispositivos. Por esa precisa razón, durante toda la cuarentena han estado valiéndose de una app que permite tener controlados en todo momento a sus ciudadanos. Hace unos días os hablábamos de una app similar utilizada por Corea del Sur.

La de China funciona de un modo parecido. En ella, los ciudadanos deben rellenar algunos datos personales, explicar si tienen algún síntoma o si han estado en algún lugar afectado por la epidemia durante los últimos catorce días. En base a dichos datos, la app genera un código QR según el nivel de riesgo que tenga cada persona de contraer la infección se le asigna un color: rojo, amarillo o verde.

Esa misma aplicación también registra la ubicación de los usuarios, por lo que las autoridades pueden saber en todo momento si alguien infectado está moviéndose a sus anchas por la ciudad. Sí, sabemos que suena mal y que atenta contra las libertades individuales, pero dicho método asegura que las cuarentenas se estén cumpliendo correctamente, cosa que en España parece bastante más difícil de controlar.

Inteligencia Artificial
Dicha aplicación para smartphones ha sido de gran utilidad, sin embargo, no es ni mucho menos la única tecnología empleada. La Inteligencia Artificial ha sido otro de los pilares.

En este sentido, el Instituto de Investigación Damo Academy de Alibaba ha desarrollado un sistema de Inteligencia Artificial capaz de detectar casos de coronavirus mediante tomografías escaneadas a través de ordenador. Dicho sistema logra identificar las diferencias entre pacientes con coronavirus y con una neumonía ordinaria con una exactitud del 96 %.

Asimismo, en estaciones de metro, tren, aeropuertos y centros de servicios sociales de toda China se han desplegado sistemas automatizados para monitorizar la temperatura.

Éstos identifican, sin intervención humana, a las personas con temperaturas elevadas. Como ejemplo tenemos Megvii, un sistema capaz de examinar a 300 personas en un solo minuto, mientras que SenseTime, además de la temperatura, identifica a los que no llevan mascarilla puesta.

Robots y drones
Como es lógico, evitar el contacto físico entre individuos disminuye la posibilidad de que el coronavirus siga propagándose. Por ese motivo, los robots también han desempeñado un papel relevante durante los últimos meses en China.

Los robots de la firma china Keenon Robotics Co representan un ejemplo perfecto de lo que hablamos. Éstos han sido utilizados en varios hospitales de China por poder entregar alimentos, medicinas y otros productos en los pabellones de aislamiento mientras un operario les da instrucciones desde la distancia.

También debemos hacer mención al vehículo móvil de tomografía computerizada (TC) del Centro de Inspección de Salud Ping An. Éste incorpora una máquina de TC, por lo que permite diagnosticar el coronavirus sin la necesidad de estar en un hospital.

Y no nos olvidamos de los drones, dispositivos que han resultado de gran ayuda durante el brote de coronavirus en China funcionando de diversas maneras. Los de DJI, por ejemplo, se han usado tanto para recordar a la gente que deben permanecer sus casas como para pulverizar desinfectante en zonas potencialmente afectadas.

Para desarrollar dichas tareas, el gobierno chino les instaló altavoces, carteles e incluso cámaras térmicas para controlar la temperatura corporal. Del mismo modo, multitud de drones han sido empleados para vigilar determinadas zonas o transportar muestras médicas, como los MicroMultiCopter.

Ésta es solo una pequeña muestra de cómo China ha utilizado la tecnología para combatir el coronavirus. Sin duda, el éxito del país asiático a la hora de mitigar el virus debería servir como ejemplo a seguir para el resto de países que intentan combatir la epidemia.

Damas y caballeros, éste es el principal motivo por el que se desarrolla tecnología. Está muy bien poder hacerse selfies de gran calidad o tener altavoces inteligentes, pero lo verdaderamente importante es que nos sea de utilidad en momentos difíciles.

Los gobiernos del mundo han usado diferentes mecanismos para combatir el Coronavirus Covid-19. Sin embargo, a pesar de estar en el siglo XXI, pocos se han aliado a los beneficios que puede brindar la tecnología. Es por eso que China, país donde se originó la pandemia, empezó a dar muestra de todo su poderío tecnológico para frenar el virus que todavía los mantiene en estado de alerta.

La aplicación de la tecnología ha ayudado a contrarrestar el brote del coronavirus en el país asiático. Desde el uso de robots encargados de desinfectar de hospitales, drones que sobrevuelan para informar y orientar a sus ciudadanos a prevenir el virus y sistemas con la capacidad analizar la temperatura corporal de una persona sin tener contacto físico y que permiten, además, diagnosticar enfermedades desde un largo alcance gracias a la tecnología 5G. Estas son algunas de las herramientas que ha aplicado China en su lucha contra la pandemia, así lo revela un reportaje especial de la agencias de noticias asiática, Xinhua.

Drones portavoces de recomendaciones

Aldeas como la de Mongolia Interior, ubicada al norte de China y Huozhuangzi, cuentan con drones que recuerdan constantemente a sus habitantes que no deben salir de sus casas sin usar mascarilla. Estos vehículos aéreos también rocían desinfectante en rincones de áreas públicas.

Uso de la Big Data y la tecnología infrarrojo

En el texto publicado por el sitio web de la agencia se explica que en el caso de los trenes, se ha incrementado el seguimiento de los pasajeros con la ayuda de macrodatos, esto gracias a los datos suministrados por la reservaciones de boletos en línea de cada pasajero, permitiendo rastrear en tiempo real a aquellas personas que pudieron haber tenido un posible contacto con pacientes de covid-19.

En metros, estaciones ferroviarias, aeropuertos y lugares públicos con alto flujo de personas se comenzó la implementación de detectores infrarrojos que permiten medir la temperatura corporal de cada una de ellas.

Robots delivery y beneficios de la tecnología 5G

Por otra parte, los conocidos robots inteligentes hacen su aporte en los hospitales de varias ciudades del país asiático, empleando entrega de medicamentos a pacientes, limpieza y desinsectación del centro de salud.

Expertos de China Unicom, una de las grandes empresas de telecomunicaciones de ese país, afirmaron al citado medio que con la ayuda de la tecnología 5G, médicos de diferentes hospitales que se encuentran separados a miles de millas, son capaces de intercambiar imágenes de tomografías computarizadas y realizar diagnósticos remotos en tiempo real.

Científicos también prueban tecnología capaz de diagnosticar casos sospechosos de COVID-19 en menos de 20 segundos, y para ellos más de 160 hospitales del país asiatico se han ofrecido para ser parte de los experimentos que se requieran.