Hernán “Nano” Calderón es el presidente de la organización que lidera estos eventos realizados sin ningún permiso ni seguridad en el sector de la autopista que abarca la comuna de Vitacura y que particularmente la noche del jueves dieron que hablar por récord de público.

Al estilo de la saga “Rápidos y Furiosos”, miembros club de fanáticos de la velocidad irrumpieron con fuerza la noche del jueves en la Costanera Norte, para dar rienda suelta a peligrosas carreras clandestinas que realizan hace tiempo en ese sector de la comuna de Vitacura y que terminaron por colmar la paciencia de residentes y automovilistas que transitan por ahí.

Se trata del grupo Speed Demons Chile que cada semana realiza esa temeraria actividad a la altura del sector San Francisco y que ha ido sumando cientos de adeptos que se congregaron allí para ver los piques de los vehículos sin ninguna medida de seguridad, parados al borde la vida o sentados sobre la división de concreto que divide el sentido de la calzada, situación que obligó al personal de la autopista a cortar temporalmente el tránsito.

Este hecho que comenzó a las 22:00 horas y se extendió pasado las 02:00 horas de este viernes, superó cualquier expectativa de quienes denuncian con frecuencia las carreras clandestinas, ya que no había registro de una convocatoria como la de la última noche.

La agrupación fundada en 2016 y destacó el “tremendo nivel de convocatoria” en sus redes sociales es presidida por el hijo de Raquel Argandoña y del abogado Hernán Calderón, Hernán “Nano” Calderón, quien mediante un lenguaje soez se vanaglorió del concurrido encuentro.

“Por el pico pacos culiaos. Se quedaron con las ganas, partéenme esta”, escribió en su Instagram.

“El próximo será en un recinto privado (pero la próxima pública no tendrán la cantidad de personal en todo Santiago para detenernos) como el pasado en Isla de Maipo. En mayo volvemos con un evento con todo para sacar las ganas que quedaron”, dice uno de los posteos de Speed Demons Chile.

Según se informó, Carabineros llegó al lugar a eso de la medianoche para dispersar a los participantes, pero éstos no hicieron caso y siguieron en lo suyo, sin registrarse detenidos, pero antes de retirarse, el personal policial cursó infracciones.

“(Carabineros) cursó infracciones e informó de igual manera al Ministerio Público de lo ocurrido, con la finalidad de que esto no se vuelva normal en el sector”, explicó el capitán de la Prefectura Santiago Andes, Esteban Troncoso.

“Según los antecedentes que se mantienen, con la gran magnitud (de personas) que se reunió anoche, esto no era normal”, concluyó el oficial.